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Tipología:Estadio Deporte
Material:Metal Aluminio
Fecha:2005 - 2006
Ciudad:Palencia
País:España
Fotógrafo:Roland Halbe
Marca:Philips Hue
En las proximidades del recinto ferial de Palencia se sitúa el nuevo estadio municipal de La Balastera, un recinto deportivo que no se limita a cumplir el estricto papel de equipamiento futbolístico y afronta nuevos cometidos a dos escalas diferenciadas.
Por un lado, a nivel de ciudad cumple una función icónica, tanto por sus dimensiones como por la visibilidad de las cuatro torres de iluminación que señalan la posición de las esquinas de sus trazas. Por otra parte, en el ámbito del tejido urbano, el estadio rompe con la idea de uso único e intermitente, concibiéndose como un espacio polivalente que diversifica el uso del suelo, incluyendo oficinas y dependencias públicas en la planta baja.
La integración con el entorno se logra a través de una intencionada conexión visual con el río y, de forma más simbólica, se ve reflejada por medio de una urbanización que juega con el color de los pavimentos, con el predominio de los tonos violáceos —propio del club de fútbol palentino—, además de las alineaciones de las arboledas. La intervención en los alrededores del solar se completa con el diseño de las marquesinas que cobijan los aparcamientos, acomodadas entre el mobiliario y las luminarias realizadas también por el mismo estudio del arquitecto autor del estadio.
El proyecto proporciona un espacio rectangular interior capaz de albergar espectáculos públicos de diverso cariz, además de combinar distintos usos a lo largo del tiempo, logrando prorrogar su periodo útil dentro de cada temporada. Para las nuevas actividades, el edificio presenta la versatilidad que le brinda un graderío móvil, con lo que las más de 8.000 personas de su aforo se pueden incrementar en casi un 20 por ciento.
La independencia funcional del conjunto se logra con la dotación de entradas y salidas directas para las distintas funciones, además de proyectar una segunda circulación interna, en la que los recorridos públicos y privados discurren en paralelo sin interferencias.
La diferenciación de los usos se enfatiza mediante el cambio de materiales que se produce en los diferentes niveles, acentuando la horizontalidad de las fachadas. La planta baja se resuelve con un cerramiento de vidrio transparente que refleja la zona más pública de la construcción en forma de escaparate, a la vez que mejora la iluminación y ventilación interiores. Sobre ella se alzan los niveles cubiertos por una chapa de aluminio perforado que tamiza la entrada de luz a las gradas de hormigón prefabricado, consiguiendo un grado de translucidez que suaviza la masividad de sus frentes.